Si vas a evolucionar, párate a pensar.
Uno de los mayores desafíos para las organizaciones es obtener notoriedad. Para conseguirlo, es importante contar con un buen logotipo y un sitio web eficiente, que pueden ayudar a dar un aspecto más profesional y a explicar el trabajo que realizan, atrayendo así a más usuarios y posibles clientes.
«Para estar en equilibrio, hay que estar en movimiento»
Esta frase de Einstein simboliza muy bien uno de los principios que toda marca debe tener: para crecer y ser relevante se debe evolucionar. El rebranding es la técnica que permite rediseñar la identidad y estrategia de una marca. Mediante el rebranding, las empresas son capaces de evolucionar al ritmo de los consumidores y la sociedad, e incluso ir por delante de ellos.
Mantener una marca fuerte a lo largo del tiempo requiere, una gestión muy cuidadosa y la toma de decisiones arriesgadas en ocasiones. Estas decisiones suponen cambios de ruta para la marca. Por muy exitosa que haya sido una estrategia en el pasado no es garantía de éxito en el futuro, más en un entorno veloz como el actual. Las propuestas, posicionamientos y mensajes que hoy nos funcionan, pueden volverse obsoletos con el tiempo. Sobre todo si la empresa no ha sabido evolucionar y dar respuesta a la nueva realidad del consumidor.
El rebranding representa uno de los pasos más drásticos a desarrollar para transformar o potenciar los alcances de una marca y su identidad visual, su nombre y demás elementos de su esencia distinguible.
Para realizar una labor de esta naturaleza es indispensable poseer conocimientos amplios tanto de la marca que va a sufrir la transformación como del conjunto de técnicas creativas de diseño que van a intervenir en dicha transformación.
Será indispensable tener un completo dominio del nombre, término, símbolo, diseño y las combinaciones que han surgido entre sí para definir a la marca como se le denomina en la actualidad y a partir de ahí habrá de desarrollarse todo un trabajo conceptual y de abstracción, seguido de un periodo de bocetaje, pruebas, ajustes y trabajo en donde la comunicación será un ingrediente fundamental.